Nos rozamos
nos gustamos
Sí pero no;
respiro...,
Y todas las noches revoloteas por mi cabeza.
Rocío Araya. Pájaros en la cabeza.
El Cuento de la primavera
Siempre me gustaron las curvas difíciles, cortas y apretadas como tus muslos. Zonas cavernosas y submarinas dónde se percibe el infinito entre sombras, grises esmeraldas y colas de dragón.
-Un inmenso desierto infinito- en el que nunca estoy solo.
Sueño con tu imagen, tu reflejo y con el salitre de tu sudor. Entro en las curvas de tu belleza que me ensimisman tal cetáceo mirando a las nubes.
Estoy vivo..., respiro.
-Un inmenso desierto infinito- en el que nunca estoy solo.
Sueño con tu imagen, tu reflejo y con el salitre de tu sudor. Entro en las curvas de tu belleza que me ensimisman tal cetáceo mirando a las nubes.
Estoy vivo..., respiro.
Miras tu sombra
olvidando la luz creadora
aunque igual
tu reflejo, es la realidad
-Luis Tejerina-
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